En su programa de gobierno, el Frente Amplio (FA) se propuso “implementar un Plan Nacional para la promoción de la Agroecología y la Agricultura Orgánica”. De acuerdo con el texto, el plan “priorizará las áreas rurales cercanas a pueblos y ciudades, cuencas utilizadas como fuentes de agua para uso humano, áreas de interés por su biodiversidad y zonas de concentración de agricultores familiares. Facilitará procesos de transición hacia la producción agroecológica y fortalecerá las experiencias ya existentes”. Hace muchos años que varias organizaciones sociales vienen trabajando en el sentido inverso al crecimiento vertiginoso que ha tenido en Uruguay el modelo del agronegocio en los últimos 15 años. Por eso, en agosto la Red Nacional de Semillas Nativas y Criollas y la Red de Agroecología comenzaron a juntar firmas para presentar al presidente de la República, Tabaré Vázquez, y al mismo tiempo para pensar los principios que debía tener el Plan Nacional de Agroecología.
El 10 de diciembre las organizaciones entregaron al prosecretario de Presidencia, Juan Andrés Roballo, las 4.000 firmas que acompañaron la carta dirigida al presidente. Pidieron promover la soberanía alimentaria “fomentando la producción de alimentos de calidad sin contaminantes riesgosos para la salud”; ampliar el número de productores en este sistema de producción, así como la distribución y el consumo; promover el uso sustentable de los bienes naturales y la conservación de las semillas criollas; aplicar políticas diferenciadas para productores familiares agroecológicos y promover la equidad de jóvenes y mujeres en los procesos; promover el acceso a la tierra; fomentar los mercados locales y las compras públicas de productos agroecológicos, y promover la formación y la investigación en agroecología, entre otros puntos.
Alberto Gómez, de la Red de Agroecología, dijo a la diaria que la Secretaría de Presidencia quedó en estudiar el tema, y las organizaciones en diseñar una propuesta. Comentó que puede haber varias formas de canalizar el plan, a partir de una propuesta del Poder Ejecutivo o también del Legislativo, y lamentó que no se haya logrado incorporar ninguna mención en la Ley de Presupuesto Quinquenal. Gómez manifestó que, además de las 4.000 firmas, se consiguió el apoyo explícito de las facultades de Agronomía y Ciencias y de la Escuela de Nutrición de la Universidad de la República, del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable y de la Agencia de Desarrollo Rural de la Intendencia de Canelones (IC).
Ventajas
La Facultad de Agronomía integra un grupo interdisciplinario de Agroecología. Beatriz Bellenda, docente de esa facultad, destacó en diálogo con la diaria la importancia de que el Consejo de la facultad haya resuelto apoyar el plan: “Esta mirada más desde la agroecología, con su pata ecológica, económica y social, recién se va incorporando en la facultad, que siempre tuvo una mirada bastante más productivista y una tendencia más hacia el agronegocio que a esa forma de producir”. Dijo que, desde el punto de vista ecológico, la propuesta de no usar químicos contribuye a evitar la contaminación de agua, suelos y aire. Desde el punto de vista social, comentó que los productores que han desaparecido en los últimos años “han sido productores familiares, porque no han podido incorporar las tecnologías que el agronegocio les propone y pierden competitividad”. “Creemos que la agroecología es una muy buena alternativa para sostener productores familiares en el campo, porque usa los recursos disponibles en cada predio”, agregó.
La agrónoma destacó que esta forma de producir necesita apoyo del Estado para hacer frente “a un mercado que juega a la competitividad económica”. Sostuvo que producir sin herbicidas “es muy complejo hoy en nuestra realidad productiva” y que “hay que diseñar los sistemas de otra manera para que el productor no tenga que estar carpiendo permanentemente, porque haría falta un montón de gente por hectárea de la que de verdad no se dispone”. Señaló que es fundamental incrementar la investigación de otras formas de producir: “Hay que invertir mucho más en investigación nacional, para que los productores tengan verdaderas soluciones nacionales probadas para encaminarse en la transición hacia la agroecología”.
En proceso
El tema estaba en el programa del FA, pero no pudo ser incluido en el Presupuesto. La Red de Ecología Social Amigos de la Tierra, la Red Nacional de Semillas Nativas y Criollas y la Red de Agroecología concurrieron al Parlamento para pedir su inclusión. El diputado José Querejeta (lista 711, FA) participó junto con las organizaciones en la elaboración de artículos aditivos a la Ley de Presupuesto para crear la Comisión Honoraria del Plan de Agricultura Orgánica, con el fin de impulsar esa forma de producción. Querejeta dijo a la diaria que trabajaron con el diputado del Movimiento de Participación Popular Nelson Larzábal y con el senador de la lista 711 Leonardo de León, y que lo presentaron cuando la discusión estaba en el Senado. Comentó que allí notaron el interés de legisladores de la oposición, como el nacionalista Luis Alberto Heber. Vieron que no era posible incluir el aditivo como tal y resolvieron “trabajarlo más para armar un proyecto más amplio y que tenga un consenso más grande que el del FA”. “Lo que vamos a hacer ahora es retomar eso”, expresó.
El diputado señaló: “Hay un acumulado de diez, 15 años, en los que un grupo de gente de todo el país mantuvo en alto ciertas banderas de agricultura orgánica, y hoy hay una madurez de masa crítica importante en términos cualitativos y cuantitativos como para hacer este proyecto, que toma la base del Programa del FA y se va a enriquecer con aportes de las ONG y los productores de agricultura orgánica, más el aporte de los otros partidos”. Dijo que la idea es vincular la producción orgánica con las compras públicas.
Aterrizar
En abril de 2015, la IC aprobó medidas cautelares para proteger la cuenca de la Laguna del Cisne, que abastece de agua potable a la Costa de Oro. En octubre comenzó a aplicarlas. Matías Carámbula, director general de la Agencia de Desarrollo Rural de la IC, dijo a la diaria que las medidas incluyen un plan para que en un período de cinco años se produzca la transición de los sistemas de producción convencionales hacia los sistemas de producción agroecológicos y orgánicos en la cuenca de la laguna. Calificó el proyecto de innovador y dijo que no hay antecedentes en Uruguay. Las referencias son dos proyectos internacionales en dos cuencas, una en Nueva York y otra en Múnich; detalló que en esta última el Estado ha entregado de 230 a 310 euros por hectárea por año a quien produzca de manera orgánica, en un plan de subsidio de 18 años.
Carámbula dijo que el proyecto de Presupuesto Quinquenal que el Ejecutivo canario elevó a la Junta Departamental incluye este plan y que, si es aprobado, se podría comenzar a trabajar en marzo. Aclaró que la IC no está en condiciones de ofrecer un subsidio como el alemán, y que el énfasis estará en la transición. Detalló que se apunta a brindar asesoramiento técnico, capacitación y formación a los productores, subsidiar algunos insumos de producción (al menos en la primera etapa) e innovar en cadenas comerciales para la venta de esos productos.
Piensan abarcar tres grupos de productores: los que ya producen de manera orgánica a agroecológica (con ellos trabajarán en la consolidación), los que están en tránsito y los productores convencionales que tengan interés en incursionar en la producción orgánica. Anunció que en febrero o marzo harán un censo. Calculan que trabajarán con alrededor de 50 productores, cuyos terrenos suman unas 4.000 hectáreas. La IC apuesta a lograr apoyo del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca o de OSE.
A los productores que no quieran reconvertirse se les ofrecerá que hagan un emprendimiento turístico, para estar dentro de lo que establece el plan para la laguna. Lo que está claro es que no podrán seguir produciendo como hasta ahora.
Amanda Muñoz
Publicado en la diaria